El ciclón, a las 2 de la tarde de este viernes |
Por fortuna no se cumplieron las temidas predicciones sobre el paso del huracán Beryl sobre Yucatán. El ciclón se debilitó al entrar a tierra y no causó daños en la cantidad y gravedad temidos.
Al mediodía de este viernes -escribo esta nota a las 2 de la tarde- el ciclón desapareció como tal y se degradó a tormenta. En esas condiciones cruzará esta tarde entre Mérida y Progreso, rumbo al Oceáno Atlántico, donde se fortalecerá y recuperará su categoría de huracán.
Alocado, serpenteante y desconcertante. Beryl nació y creció rápidamente a categoría 5, luego descendio a 4, a 3 y 2, y volvió a subir a 3. Después ingresó a Quintana Roo rosando la medida que lo ubica entre nivel 2 y 3 y posteriormente cayó a clasificación 1 y casi enseguida derivó en tormenta tropical.
Beryl hizo fallar predicciones. Avanzó lento, tardó en llegar a Quintana Roo. Fue cambiando de potencia y modificando su dirección. No cruzó el Cono Sur, como estaba pronosticado, sino el centro-norte de Yucatán.
En la capital yucateca no llovió en la tarde ni en la noche de ayer jueves ni en la madrugada ni la mañana de hoy viernes. Fue hasta el mediodía cuando en esta ciudad comenzaron las lluvias y vientos, pero nada extraordinario en ellos. Su cantidad y fuerza fueron las de una precipitación pluvial ordinaria.
Mañana sábado 6 se restablecerán las actividades. El domingo la vida recuperará su ritmo tradicional.
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