Danza, 8 de
la noche Tearo Peón Contreras.- El
Ballet de la Ciudad de Mérida que dirige Erika Argüelles presenta su versión de
la suite La Bella Durmiente, uno de los espectáculos clásicos de la danza
clásica.
Boletos a $115 y $95.
Teatro, 7 de
la noche, Tapanco Centro Cultural.- El grupo teatral Trasbamarinas presenta la
obra “El corazón delator”, un drama
basado en un texto de estadounidense Edgar
Allan Poe. General $80, Estudiantes e Inapam $60
Reservaciones al Tel: 999
387 9206
Teatro, 8:30
de la noche, Casa Tanicho.- Sigue la temporada
de la obra Fritzl Agonista, del
dramaturgo Emilio García Wehb, con tres actores en escena. Este montaje
escénico surgió de la indagación sobre el abuso sexual infantil y se basa en un
hecho real: el caso de Elizabeth Fritzl, quien vivió encerrada en el sótano de
su casa mientras su padre, Josef Fritzl, abusó sexualmente de ella durante 24
años.
Mañana sábado hay otra
presentación.
Boletos a $100 y $80.
Reservaciones al Tel: 927 32 07.
Artes circenses,
8 de la noche, Centro Cultural Olimpo.- Carolina Cañas es una trapecista del
interior del país radicada en Mérida y que se dio a conocer localmente con
espectáculos de su proyecto Curioso Circo. Ahora se une a la actriz Ana Alcocer para ofrecer juntas
la obra Punto de Cruce, en el cual, en forma jocosa, muestran al público los
gajes del oficio circense: los peligros, los efectos en el cuerpo sometido al
esfuerzo físico, la dificultad para
crear números atractivos para el público, etc.
Ambas artistas están
unidas ahora bajo la compañía Observación Múltiple, la cual montó el espectáculo que se ofrece
ahora.
Boletos a $50 y $25.
Espectáculo de Luz y Sonido, 8:30 de la noche, en la Catedral.- Presentación del
espectáculo de luz y sonido “Piedras
Sagradas”. Es una narración sobre la fundación de Mérida con proyección de
videomapping sobre la fachada de la Catedral. Es un evento gratuito, dirigido a
turistas y meridanos.
En el Corazón de Mérida, a partir de las 9 de la noche, Centro Histórico.-
Los jueves, viernes y sábados se cierran calles del centro de la ciudad para
que los meridanos y turistas disfruten de ese punto de la ciudad.
En esas horas los
restaurantes de la zona que sacan sus mesas y sillas a la calle, actúan grupos
musicales, se ofrecen artesanías y algunos pintores exhiben sus trabajos al
paso de la gente.
Esta actividad es oportunidad
para disfrutar de esa parte de la ciudad sin su movimiento de vehículos.
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