Viernes feliz

Teatro, 8 de la noche, Casa Tanicho.- El actor, guionista y director teatral Teo Flores presenta el montaje “Pequeños corazones exiliados”, una adaptación de la famosa obra “Los niños de Morelia”, de Víctor Rascón Banda, que habla sobre los infantes españoles que fueron enviados a México durante la guerra civil en la península ibérica.

Esta presentación se repetirá mañana sábado, participan estudiantes del Centro Estatal de Bellas Artes. 

Boletos con cuota simbólica de $35.
Casa Tanicho está cerca de la avenida Reforma, en el cruce de las calles 66 y 41.

   

Teatro, 9 de la noche, teatro La Rendija.- La compañía Síndrome Belaqua continúa con las presentaciones de la obra “Bitácora de Guerra”, una Idea original, dramaturgia y producción de Majo Calamidad, bajo la dirección de Ulises Vargas.

Resumen: es un recorrido para recordar y traer al presente una experiencia:

una medianoche de 1924 se reúne en el estudio de la empresa Fotografía Guerra un grupo disidente de la Liga de Maestros Socialistas para planear una actividad.

Cien años después, en esa misma hora, una pareja se encuentran en el Archivo Fotográfico Pedro Guerra revisando viejas fotografías. Rodeados por el fantasma que hay en esas imágenes, la pareja descubre lo que muestran esas imágenes. Son recuerdos y  obsesiones que se exponen ante el publico.

Elenco: Gina Martínez Ortega, Alejandra Argoytia/ Susan Francine, Edu Navarrete y Jorge Luis Reyes.

Boletos a  $60 (general) y $35 (estudiantes)

Habrá otras funciones mañana sábado, a las 8 de la noche, y el domingo, a las 7 de la noche.

Este teatro está a tres esquinas del parque de Mejorada, en el cruce de las calles 50 y 51.

Luz y Sonido, 8:30 de la noche, en la Catedral.- Presentación del espectáculo de luz y sonido  “Piedras Sagradas”. Es una narración sobre la fundación de Mérida con proyección de videomapping sobre la fachada de la Catedral. Es un evento gratuito, dirigido a turistas y meridanos. 

En el Corazón de Mérida, a partir de las 9 de la noche, Centro Histórico.- Los jueves, viernes y sábados se cierran calles del centro de la ciudad para que los meridanos y turistas disfruten de ese punto de la ciudad.

En esas horas los restaurantes de la zona que sacan sus mesas y sillas a la calle, actúan grupos musicales, se ofrecen artesanías y algunos pintores exhiben sus trabajos al paso de la gente.

Esta actividad es oportunidad para disfrutar de esa parte de la ciudad sin su movimiento de vehículos.